Alimentos sanos y campos productivos
La sociedad latinoamericana se está urbanizando y cambiando su comportamiento de consumo; la brecha entre lo urbano y la ruralidad es cada vez más amplia. La solución planteada busca crear vínculos entre proveedores rurales de alimentos sanos y los consumidores preocupados por su alimentación y por contribuir al desarrollo sostenible, sin agregar plásticos de un solo uso a la cadena de valor que une a los productores de comida con los consumidores en las ciudades. Al buscar un modelo de comercio justo y descarbonizado, se agregará valor a las comunidades productoras de alimento, mejorando su calidad de vida y dignificando su trabajo, a la par que se reduce el plástico de envases y empaques de un solo uso en la cadena de alimentos, trayendo impactos positivos frente a la polución por plástico y el cambio climático. El modelo incluye oferta por temporada, capacitación a campesinos, transporte eléctrico e inventario cero
América Latina y el Caribe es la región en desarrollo más urbanizada del planeta, con 8 de cada 10 personas viviendo en ciudades (para 2018 cerca de 520 millones de personas según BM) y alcanzará el 86% de su población urbanas para el 2050 (BID). Solo en Colombia 25 millones de personas se sumaron a la situación de inseguridad alimentaria y desnutrición entre 2015-2016 (FAO) y para ALC, el número de personas con hambre alcanzó una cifra de 42,5 millones (FAO, 2019).
La disponibilidad de alimentos de la región es suficiente para cubrir los requerimientos de la población, sin embargo, existen retos: la implementación de agricultura sostenible y diseño de modelos que incrementen ingresos de productores agrícolas (y mejoren calidad de vida e índices de NBI).
Ahora bien, en Colombia se estima que las ventas de envases y empaques en 2019 superaron los 45.000 millones de unidades, de las cuales el poliestireno expandido, bolsas y los polímeros de película usados para la comercialización de alimentos frescos (frutas, verduras) hacen parte. El proyecto actual propone una cadena de valor de comercialización de alimentos saludables, basada en producción sana en el campo que tendrá una base de comercio justo y cero plásticos de un solo uso
El origen del proyecto es el reconocimiento de la brecha existente entre ciudades y zonas rurales en LAC, el desperdicio de alimento y de capacidad productiva existente en el campo cercano a las ciudades y la tendencia social a conseguir alimentos saludables y libres de procesos agrícolas contaminantes (pesticidas, plaguicidas, fertilizantes sintéticos, etc.). Son más de 100 millones de habitantes de zonas rurales en LAC que requieren mecanismos alternativos para generar ingresos, medios para hacer llegar sus productos a la demanda potencial en las ciudades y que también requieren de formas alternativas de producción vinculadas con la sostenibilidad. Por otra parte, si bien la clase media en LAC puede estar conformada alrededor de 450 millones de personas, al menos la tercera parte tienen la capacidad económica para comprar productos no solo por precio, sino por calidad o por motivaciones sociales/ambientales (entre otras). Garantizar cerrar el cortocircuito entre la producción de alimentos sanos y el consumo de los mismos en las ciudades, garantiza salud para los habitantes, mejor calidad de vida, apropiación en el territorio, oportunidades de negocio para lo rural y barreras invisibles para evitar los procesos de urbanización de las zonas periurbanas con dedicación histórica a la agricultura.
El proyecto “alimento sano, campo próspero” es un nuevo modelo de negocio para la oferta y demanda de alimentos en las zonas de actividad agrícola de las áreas colindantes con grandes ciudades, que busca acortar cadenas de valor del proceso de comercialización de frutas, verduras y hortalizas con el fin de transferir una mejor remuneración a los productores y permitir una comercialización de productos de temporada frescos, sin el uso de empaques plásticos, sin el manejo de inventarios ni sistemas de refrigeración y almacenamiento, y con una flota de transporte carbononeutral. Para esto, el proyecto contacta campesinos con minifundios que estén ubicados cerca de ciudades (por ejemplo, para Bogotá el radio es hasta de 100 Km) y cuyas prácticas agrícolas sean de agricultura natural (labranza mínima, producción orgánica), con el objeto de ofrecer productos a través de una plataforma on line, en donde compradores de nivel adquisitivo medio-alto en las ciudades, puedan adquirir productos recién cosechados, los cuales reciben a domicilio y en medios tradicionales de empaque (canastos, bolsas de tela, etc). Se busca garantizar al campesino un incremento entre el 12 y el 20% del valor de sus productos, se brinda soporte y capacitación hacia la agricultura y modos de vida sostenible, y se busca la carbononeutralidad de la entrega (se estima balance positivo de captura de carbono a partir de 2021) y el empleo de cero plásticos de un solo uso en envases y empaques. La plataforma web irá contabilizando tanto la prevención en uso de envases y empaques plásticos como las emisiones de carbono reducidas durante las transacciones.
Se promueve la organización en los campesinos en unidades territoriales (nodos) que, inspirados en cooperativas, pueden coordinar la producción y la información, sin embargo, la comunicación entre el proyecto y el campesino es directa (teléfono fijo, móvil o WhatsApp). La plataforma web captura las solicitudes de los compradores en la ciudad y se transfiere la solicitud a los campesinos, y así mismo, la información de la oferta de productos se alimenta en la plataforma web para que la disponibilidad sea conocida. Regularmente, un servicio de transporte recogerá los pedidos en cada uno de los nodos, y los llevará a la ciudad en donde serán entregados a los compradores. El pago será vía web (tarjeta de crédito, débito) y la transferencia a los productores y a los transportadores será inmediata y electrónica (sin necesidad de bancarización).
- Alejar los modelos de negocio del uso de plásticos en el embalaje y el transporte
- Reducir los residuos y plásticos de un solo uso a través de la promoción del cambio de comportamiento del consumidor e incentivando la reutilización y el reciclaje
- Prototipo
Considero que la innovación es poder abordar el problema del plástico de un solo uso a través de una visión de raiz, con aplicación de design thinking y diseño centrado en el usuario, debido a que no es simplemente cambiar el material que sirve de empaque para proteger el producto agrícola que estará días o semanas en refrigeración mientras alguien lo compra, sino cambiar el modelo de oferta y demanda de los alimentos, procurando que sean sanos y sostenibles, pero así mismo, que tengan una cadena de comercialización corta y ágil, que evite el almacenamiento y por lo tanto, que mantenga las mejores propiedades nutricionales de los mejores productos. Para esta solución, se usará tecnología (plataforma web, medios de comunicación proyecto-campesinos) que facilite los encadenamientos, y de la misma forma, la tecnología ayudará a visibilizar el impacto social (comunicac beneficiada) y ambiental (polución de plástico evitada, GEI no emitidos o compensados, entre otros), de forma tal que se busque la compra consciente.
Por último, el modelo busca transferir el mayor recurso económico posible al productos, para hacer un proceso de comercio justo en el cual se dignifique al productor agrícola de las zonas rurales; esta propuesta emerge de un interés de trabajar en innovación social, para que las soluciones propuestas apunten a ser emprendimientos sostenibles, es decir, que agreguen de forma simultánea valor a las dimensiones económica, ambiental y social.
El prototipo actual emerge de un seguimiento realizado sobre la situación de campesinos en el área rural de San Juan de Rioseco, una población de 7000 habitantes (2000 de ellos en casco urbano) que queda a 90 kilómetros de la capital de Colombia (Bogotá), donde nació mi esposa. Como muchas poblaciones en LAC, la brecha entre necesidades básicas satisfechas de zonas urbanas vs rurales son amplias. San Juan de Rioseco es una población que recibe anualmente un presupuesto de 3,5 millones de dólares, y por lo tanto, las posibilidades de atender necesidades se ven restringidas a las capacidades de gestión del alcalde. Como San Juan, se ha documentado que poblaciones con vocación agrícola (afectadas por el conflicto años atrás) cercanas a Bogotá tienen condiciones equivalentes.
Entre 2018-2019, se realizaron encuestas no parametrizadas con campesinos, evaluando las necesidades que plantean frente a su actividad agrícola, las perspectivas de su trabajo y el panorama ideal frente a su futuro. Entre las necesidades evidenciadas están: mejores ingresos, mejor calidad de vida, medios para vender sus productos.
La comercialización de productos alimenticios implica en la actualidad cadenas largas, que a parte de reconocer bajos precios a los productores, se valen de la venta al menudeo utilizando ampliamente plásticos de un solo uso (poliestireno expandido, bolsas de polietileno de baja densidad, películas plásticas). La solución planteada es sistémica y previene desde el consumo consciente y de raiz, la generación de plásticos de un solo uso en la cadena de valor de alimentos en grandes ciudades.
- Residentes rurales
- Residentes urbanos
- Muy pobres
- Bajos ingresos
- Minorías/Poblaciones previamente excluidas
- Refugiados/Desplazados internos
- Colombia
- Colombia
En la actualidad (Diciembre 2019), el prototipo está vinculando a cinco unidades productivas de un nodo territorial en San Juan de Rioseco, que está conformado directamente a 10 campesinos y dos transportadores e indirectamente a 26 personas.
El planteamiento es que a un año (Enero 2021) el proyecto debe cobijar al menos cuatro nodos territoriales (San Juan de Rioseco, Nimaima, La Calera y Guasca), llegando a atender directamente a cerca de 120 campesinos y siete transportadores, e indirectamente a casi 300 personas.
Las proyecciones para cinco años (Enero 2026) es que la empresa atienda cinco centros urbanos capitales de Colombia y cinco centros urbanos capitales fuera de Colombia, en al menos tres países de LAC; cada centro urbano será atendido entre cinco y siete nodos territoriales, por lo que se impactará positivamente 10 ciudades capitales de LAC y más de 50 poblaciones con vocación agrícola de cuatro países, llevando beneficios directamente a más de 500 campesinos, e indirectamente a más de 1200 personas.
Estas cifras no incluyen los impactos positivos de los consumidores que están ubicados en las ciudades (actualmente y en un año: Bogotá (Colombia), en cinco años, diez ciudades capitales de LAC) y que se verán beneficiados por el acceso a alimentos sanos y de alta calidad. Los datos tampoco mencionan el impacto generado por la línea de negocio de restaurantes, que se plantea iniciar en el año dos y que afectará positivamente la salud y el bienestar de los consumidores de alimentos de calidad y nutritivos.
No hay medición preliminar, por cuanto el prototipo dio inicio en el segundo semestre del año 2019, sin embargo, se debe decir que dependiendo del producto, de cada 100 gramos de producto fresco agrícola, entre 2 y 15% de su peso corresponde a empaque y envase plástico; a continuación se presenta el planteamiento de KPIs.
Impacto ambiental (principales): unidades vendidas sin uso de plástico de un solo uso, Kg de productos vendidos sin plástico de un solo uso, Kg de plástico de un solo uso no empleados en empaques y envases; (secundarios): huella de carbono por transporte de productos, Kg de alimentos producidos bajo prácticas de agricultura sostenible, Kg de fertilizantes artificiales no usados en la producción agrícola, Kg de plaguicidas/herbicidas no usados en la producción agrícola.
Impacto social (principales): campesinos vinculados al proyecto, No. de nodos territoriales vinculados al proyecto, No. de clientes nuevos, No. de clientes con recompra, Medición de satisfacción de productores, medición de satisfacción de compradores. (secundarios): personas directa e indirectamente vinculadas al proyecto, madres cabeza de familia vinculadas al proyecto, personas desplazadas/reinsertadas vinculadas al proyecto, No. de poblaciones vinculadas al proyecto.
Impacto económico (principales): % de variación ingresos campesinos vinculados al proyecto, ventas mensuales, rentabilidad del proyecto, costos evitados por no uso de plásticos de un solo uso en empaques y envases. (Secundarios): Ahorros reportados en la producción agrícola por campesinos, ventas a consumidores persona natural, ventas a personas jurídicas.
El modelo sobre el cual se basa el prototipo es altamente replicable, y la propuesta que se plantea en términos de objetivos puede realizarse de una forma más ágil que la expuesta, sin embargo, el panorama conservador que se presenta hace parte de la primera planeación estratégica desarrollada.
Primer año.
General: pasar del prototipo a una solución empresarial consolidada a través de una figura jurídica en Colombia
Específicos: *consolidar el primer nodo regional con el fin de probar el modelo propuesto y realizar los ajustes requeridos para la expansión territorial en el departamento de Cundinamarca (Colombia)
*Consolidar la plataforma web y la aplicación en sus versiones beta, para la atención de la oferta y la demanda de productos agrícolas, así como las alianzas con sector financiero.
*expandir el modelo pivotado a tres nodos regionales adicionales, con el fin de generar una plataforma que permita atender las demandas de alimentos de los consumidores de la ciudad de Bogotá (Capital de Colombia)
Año quinto
General: Expandir el modelo de negocio de alimentos sanos y campos prósperos fuera de las fronteras del país, apalancado en el éxito conseguido en cinco ciudades capitales de Colombia
Específicos: *consolidar los nodos regionales requeridos para la atención de la demanda de cinco ciudades capitales de Colombia
*Consolidar las alianzas requeridas para la expansión del modelo de negocio al menos a tres países de LAC
*Posicionar el modelo como un aliado del sector público en temas de reducción de pobreza, cero hambre y consolidación de territorios sostenibles
Barreras del primer año
En la actualidad, el prototipo está siendo desarrollado como una actividad en paralelo de la actividad laboral del equipo gestor; por ello, la principal barrera son los recursos de tiempo y financieros disponibles para avanzar de forma decidida y ágil frente a la propuesta. Principalmente, se requieren recursos económicos para avanzar en la versión beta de la plataforma web, debido a que el prototipo está realizando el proceso a través de mecanismos digital/analógicos (persona a persona utilizando teléfonos).
La segunda gran barrera es el acceso al segmento de mercado, por cuanto se hace necesario que las personas conozcan del proyecto y deseen vincularse a través de la compra, y una vez satisfechos con el servicio, puedan contribuir con la difusión del mismo (voz a voz).
Barreras del año quinto
Principalmente la barrera hace referencia a la necesidad de reconocimiento del marco jurídico para realizar los procesos de implementación del modelo de negocio en otros países; de la misma forma, el marco legal para la contratación de personas y los esquemas de operación de las empresas y/o generación de alianzas estratégicas para la operación por fuera del país.
El desarrollo de la plataforma digital (web y app) para atender los mercados fuera de Colombia también implicarán recursos financieros específicos, así como el despliegue publicitario y los estudios de mercado previos. Los contactos con los productores fuera del país tendrán brechas culturales que deberán ser atendidos de forma adecuada.
Planteamiento Barreras del primer año
La barrera de tiempo de dedicación será abordada a partir de la inyección de capital de riesgo del equipo gestor al proyecto, suficiente para poder avanzar en la versión beta de la plataforma web y así mismo, en el segundo semestre del año 2020 contratar a una persona que se encargue de las acciones operativas de la empresa.
La atención de la barrera de acceso al segmento de mercado, se plantea manejarla a través del posicionamiento del proyecto en ecosistemas especializados (mercados verdes, bionegocios, ferias saludables) en donde se construya imagen y reputación, así mismo, con una inversión en mercadeo digital que incluirá redes sociales del proyecto.
Barreras del año quinto
Las barreras que presenta el desarrollo de la expansión en otros países hace necesario desde el tercer año de la empresa, iniciar la generación de alianzas estratégicas para la operación por fuera del país a través delas redes de contacto profesional propias del grupo gestor.
Para el año dos - tres, se hará necesario la consecución de recursos a través de un inversor/ fondo inversor que permitirá acopiar los recursos necesarios para la expansión y consolidación del proyecto en el mercado nacional (y posteriormente en LAC).
las alianzas estratégicas también deben estar enfocadas no solo en lo comercial, sino en los contactos con productores fuera del país para atender las brechas culturales que puedan existir de forma adecuada.
- Mi solución ya se está implementando en América Latina y el Caribe
Desde el año 2019, segundo semestre, se inicio el prototipo en Colombia, específicamente en el primer nodo territorial ubicado en San juan de Rioseco (departamento de Cundinamarca); allí se ha contactado a cinco unidades productivas (familias) en donde hay 10 campesinos (y sus familias) implicados; con ellos, se validaron los hallazgos realizados en las encuestas no parametrizadas realizadas en los dos años anteriores, y se está documentando las cantidades, tiempos y costos de producción de diez productos agrícolas específicos. De la misma forma, se están realizando encuestas a personas que están dentro del segmento de mercado para en el segundo trimestre del 2020 iniciar la parte operativa del prototipo, esto es, establecer a través de la plataforma tecnológica (la cual en la actualidad es una plataforma en formato wix gratuito) los pedidos y empezar a medir las variables clave para el modelo (tiempos de atención, necesidades de capacitación, precios y costos, oferta de valor, imagen, reputación).
En la actualidad también se está desarrollando de forma teórica la medición de huella de carbono del proceso de transporte de los productos agrícolas, para escoger la forma como se realizará la compensación de las emisiones, mientras se consolida el modelo de negocio que permita emplear transporte eléctrico para los aspectos logísticos. Desde noviembre 2019 se están probando los tipos de empaques (bolsas de tela reusables, canastos), así como los proveedores en Bogotá y en la región, con el fin de seguir agregando valor social y económico a pequeñas empresas.
- Híbrido con fines de lucro y sin fines de lucro
Actualmente dos personas hacemos parte del grupo gestor: mi esposa y yo. Ambos nos dedicamos a tiempo parcial a la iniciativa, por cuanto somos empleados (yo docente universitario, ella diseñadora de procesos en una empresa).
Indirectamente están vinculados (pero no contratados) dos personas que prestarán el servicio de transporte de los productos agrícolas desde el primer nodo territorial.
también indirectamente está vinculada una madre cabeza de familia, campesina, que trabaja como punto de enlace en el nodo territorial de San Juan de Rioseco.
En primer lugar, existe un vínculo de cariño, aprecio del territorio y reconocimiento de la labor del campo en la tierra de San Juan de Rioseco, por cuanto el papá (QEPD) de mi socia y esposa fue tres veces alcalde electo popularmente, y su hermano acaba de culminar también un periodo de alcaldía. Esa cercanía a la situación y necesidades de la población, sobre todo de la rural, es ampliamente conocida por nosotros.
Por otra parte, como voluntarios en la asociación de exbecarios de JICA, hemos conocido muchos programas que se han desarrollado en municipios de bajos ingresos alrededor de ciudades capitales, principalmente de Bogotá, así como sus problemáticas de desperdicio de productos agrícolas por falta de canales de comercialización.
Llevo nueve años como docente de la Universidad Ean, en los cuales a partir de mi experiencia previa como gerente y como emprendedor, he venido brindando contenidos de planeación estratégica y gerencia a estudiantes y empresarios, sobre más de 200 casos reales. Además, hace tres años trabajo en el Instituto para el emprendimiento sostenible, que es una unidad que promueve la creación de empresa en alumnos y egresados de la institución.
A lo largo de mi vida profesional (20 años), he trabajo en gestión ambiental y sostenibillidad, incluyendo temas de residuos poscosecha y agricultura orgánica, y actualmente estoy culminando un proceso de formación en innovación social con Portland State University.
Queremos con mi esposa llevar bienestar y reconocimiento a los campesinos de LAC, así como alimentación sana a las ciudades.
Existen múltiples iniciativas como mercados verdes, mercados campesinos, asociaciones de productores y similares, las cuales hemos venido reconociendo a lo largo del trabajo en este proyecto, y con quienes esperamos irnos aliando para hacer sinergias frente al proceso, y más allá, ampliar el impacto de la reducción de plásticos de un solo uso en sus envases y empaques (porque muchos de ellos tienen objetivos como la alimentación sana u orgánica, o los productos frescos, pero no tienen en su modelo de negocio evaluado el impacto de emplear plástico de un solo uso en las presentaciones a la venta.
De la misma forma, queremos hacer parte de una meta-plataforma que sirva, a manera de mall, para la identificación de alternativas de consumo saludable y consciente para la sociedad; a través de ella, se espera ahondar en el impacto social de los cambios de hábito y el reconocimiento de las alternativas a los esquemas tradicionales de comercialización de productos alimenticios.
Se tiene cercanía con la cámara de alimentos de la ANDI (asociación nacional de empresarios, uno de los gremios privados más representativos en Colombia) para buscar el impulso de nuestra iniciativa y con ella, el crecimiento del sector.
La propuesta de valor planteada es crear un canal de comercio justo de productos agricolas, para dignificar la labor del campo, permitir el acceso a alimentos sanos y nutritivos y reducir el impacto ambiental al evitar los plásticos de un solo uso y hacer un manejo responsable de las emisiones de GEI en la cadena de valor.
Se manejan dos clientes: los campesinos, con quienes tenemos el compromiso de mejorar las condiciones de comercialización de sus productos agrícolas,a la par que los vinculados a programas de producción natural, orgánica y sostenible; y los consumidores en las ciudades, a quienes ofrecemos productos frescos, nutritivos y de alta calidad, que generan un bajo impacto ambiental negativo pero un alto impacto social.
El canal de comercialización es virtual a través de plataforma web y aplicación, en donde los productos agrícolas se encontrarán a un precio competitivo para el segmento de mercado objetivo (clase media alta y clase alta), y los productos serán llevados a domicilio usando bolsas de tela, de fibra y/o canastos (que podrán ser adquiridos o comprados).
Los recursos clave son las alianzas comerciales y de transferencia de conocimiento con los campesinos, con quienes se establecerá una labor gana-gana por cuanto aprenderán a ser más productivos y a no usar plástico, a la par que venderán sus productos a precios justos.
La monetización se brinda por un porcentaje de la venta, que permite sostener el sistema, después de solventar los costos de producción y gastos administrativos.
En el planteamiento del modelo de flujo de capital, se observa que el primer año es el crítico en la organización, por cuanto se hace necesario acopiar recursos económicos para el desarrollo de la plataforma web y de la app, así como la estrategia de comunicación digital y las redes sociales del proyecto. Este capital, en un inicio, provendrá de fondos propios del equipo gestor, así como los costos asociados a personal durante el primer semestre del 2020. en el segundo semestre, con la entrada de la parte operativa del piloto, se esperan generar ingresos por ventas suficientes para conseguir un apoyo operativo de una persona y así fortalecer el crecimiento de la empresa.
A partir del segundo año, se espera conseguir un capital de inversión que permita realizar la ampliación hacia otros nodos territoriales, a la par que se consolida el equipo operativo en región; de la mano de los ingresos estimados, se espera que el tiempo de retorno sea de 2,8 años, es decir que a partir del tercer año la iniciativa empezará a dar números positivos en su PyG.
La tasa interna de retorno del proyecto es buena (estimada por escenarios entre el 21 y el 28%), pero lo más interesante es que desde la parte operativa del prototipo (I semestre 2020) muchos de los impactos ambientales, sociales y económicos se empezarán a ver, lo que hace que este proyecto, sin querer ser un emprendimiento social, si tenga un fuerte componente de agregación de valor en sostenibilidad
En primera medida, el poder acceder a uno de los premios en efectivo otorgados por el Desafío Rethink Plastics es una motivación de la postulación, si bien no necesariamente es la principal. Esto evitaría generar endeudamiento bancario, y por lo tanto, los costos financieros de la deuda en una etapa temprana para el emprendimiento.
Las principales motivaciones de la postulación son la posibilidad de ganar reconocimiento al estar participando en este desafio: al ser un prototipo en la actualidad, la consolidación de imagen y reputación para apalancar apoyos y recursos locales y regionales debe trabajarse, y tener al BID, al MIT y a las demás organizaciones detrás, ofrecen un panorama positivo para el proyecto. De otra parte, otra motivación es la posibilidad de conectar y hacer alianzas, que puedan facilitar el aunar esfuerzos de diferentes iniciativas alrededor de la prevención de la polución de plásticos de un solo uso. Es significativo que el evento de cierre sea en una ciudad costera (Barranquilla), por cuanto es evidente que gran parte de la problemática de los plásticos de un solo uso se evidencian en mayor medida en la contaminación de mares y océanos, y el simplemente estar en ese escenario y conocer otras iniciativas, puede abrir caminos para realimentar nuestro emprendimiento y hacerlo crecer.
Por último, el simple hecho de participar, de plasmar en palabras nuestro modelo de negocio y ponerlo a consideración de otros, para la iniciativa ya es una ganancia complementaria.
- Modelo de negocio
- Tecnología
- Modelo de financiación e ingresos
- Talento o miembros de la junta
- Legal
- Medios y oportunidades para hablar
Poder conocer de iniciativas que permitan el desarrollo de software para micro y pequeñas empresas es valioso, y seguramente deben haber muchas iniciativas de este estilo que podrían reducir los costos de los lanzamientos de la plataforma web y de la aplicación, y de paso, permitir ganar experiencia en diseño .
Conocer organizaciones que propenden por el desarrollo sostenible de las personas que viven y trabajan en el campo el LAC sería algo muy valioso, por cuanto fortalecería el componente de agregación de valor social del proyecto y así mismo, permitiría mejorar y adaptar el modelo y sus beneficios para su expansión en LAC.
Conocer iniciativas que promuevan la movilidad baja en carbono, movilidad eléctrica, y similares, sería interesante por cuanto es el panorama al cual se pretende llegar con el proyecto para evitar en el mediano plazo las compensaciones altas.
Conocer experiencias de agricultura sostenible de la mano de organizaciones sociales o de campesinos puede ser un ejercicio muy valioso para nutrir con el conocimiento ancestral nuestra propuesta, y crear un diálogo de saberes entre distintas comunidades rurales de LAC
Contar con el apoyo de organizaciones que puedan apoyar y asesorar la expansión de este tipo de iniciativas empresariales por fuera de las fronteras del país de origen es vital, por cuanto dará la seguridad de reconocer, adaptarse y velar por el cumplimiento de la normativa.
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